Si fuese por Cargo, podríamos decir que el género de películas de zombies tiene muchos síntomas de cansancio. Y sin embargo, pese a la gran cantidad de películas de este género, podemos encontrar fiascos como la serie Fear The Walking Dead que pretendía seguir la tendencia marcada por su serie original o multitud de cintas cortadas todas por el mismo patrón. Aun así, podemos encontrar algo de frescura en la serie de Netflix Santa Clarita Diet, en la película coreana Train To Busan, o en la «original» Orgullo + Prejuicio + Zombies.
Cargo tiene muy buena factura. Se puede palpar la tensión durante los primeros momentos del metraje, cuando un matrimonio y su hija, tan solo un bebé, viajan en barco por un río mientras sus provisiones se acaban. Por suerte, mientras la mujer está echándose una siesta, él se encuentra con un velero encallado con botes de comida en buen estado. Justo antes de salir del velero escucha un ruido así que, sin prisa pero sin pausa, decide salir de ahí.
Sin embargo, en el cambio de turno de la siesta, su mujer, por un momento preocupada por el descubrimiento, decide ir ella sola al velero a ver qué se encuentra. Cuando su marido se despierta, ve cómo su mujer ha sido mordida y ya nos imaginamos el drama que va a ocurrir. Esas primeras escenas, en las que el agobio y la tensión se hacen patentes, son las que crean unas expectativas demasiado altas sobre lo que ocurrirá después.
Porque el desarrollo de la historia se queda en una insulsa trama de supervivencia en un mundo del que desconocemos cómo acabará y si sobrevivirá alguien. Tiene sentido que Cargo esté basada en un cortometraje. Es en este formato cuando determinadas historias funcionan. ¿Por qué arriesgarse en un largo? Ya hemos visto diferentes adaptaciones que funcionan unos minutos y fracasan por agotamiento o por no saber desarrollar: Mamá, Nunca apagues la luz, Pixels… No todas van a ser Whiplash.
En resumen, Cargo es una película de zombies más. Quizá veamos interesantes los primeros minutos o un paisaje que normalmente no vemos, pero se agota a medida que avanza.
Yay & nay
Lo mejor: El suspense de los primeros minutos. El paisaje. La fotografía.
Lo peor: El ritmo. Las subtramas. El poco interés que produce lo que le ocurran a los protagonistas.
Verdad como un puño lo de los cortometrajes, Mamá como largo fue de peli de los domingos. Cargo aún no la he visto, los zombis me dan pereza. A menos que vea que va a ofrecer algo nuevo, pasando…
Pues mira, el corto está muy bien. Te lo recomiendo! https://youtu.be/gryenlQKTbE