Los créditos iniciales de La noche de Halloween ya nos muestran claramente sus intenciones. David Gordon Green (Superfumados, Expertos en crisis, Stronger) dirige y coescribe junto a Danny McBride y Jeff Fradley lo que parece estar sacado de una conversación de pasillo de Vice Principals.
Como si de una continuación de la propia película original de Carpenter se tratase, la trama comienza con dos periodistas que intentan llevar la historia de Mike Myers a su podcast. Primero, realizando una visita al asesino en serie 40 años después de los sucesos acaecidos en Haddonfield y, después, llevándonos al slasher más clásico y, a la vez, menos arriesgado que he visto en mucho tiempo.
Repleta de referencias al clásico del 78, la protagonista es aquí Laurie como la abuela que ha pasado por una crisis y no es capaz de superar su pasado como víctima de un asesino en serie.
Sin embargo, las dos generaciones siguientes, su hija y su nieta, la toman por loca (más la hija que la nieta), ya que su vida actual gira en torno a Mike Myers pese a que sigue recluido en una institución psiquiátrica. Sí, el mismo en el que Mike Myers estuvo cuando era niño.
Sobre el desarrollo de la historia, poco más que decir salvo que está llena de referencias a planos que hemos visto en la Halloween original y cambiando la perspectiva. Esta vez es Laurie quien ocupa el espacio que ocupaba el Mike Myers en el 78.
En conclusión, La noche de Halloween 40 años después de la original no la salva ni siquiera la banda sonora adaptada de John Carpenter. Eso sí, como slasher clásico, se deja ver y entretiene, sobre todo con su plano-secuencia de Mike Myers paseándose por diferentes casas.
Yay & Nay
Lo mejor: El plano secuencia de Mike Myers. El inicio de los podcasters y el final de su historia. Los créditos iniciales y otras referencias.
Lo peor: La trama es muy común y previsible. No arriesga ni saca provecho de las tres generaciones planteadas en esta secuela. Abusa tanto de las referencias que parece estar hecha para los fans.