Michael Cera interpreta en Rebelión adolescente a Nick, un adolescente intelectual, hijo de padres divorciados y virgen, que descubre el amor en Sheeni, su vecina en el camping de caravanas cuando se va una semana de vacaciones. De ser un simple adolescente calzonazos, se intenta convertir en un macarra, pero lo único que consigue es crear un personaje basado en lo que le gustaría ser, François Dillinger, y cometer un par de delitos para que la policía lo persiga, intentando conseguir a su amada.
Desde luego, lo mejor de la película es la creación de este personaje y sus frases, interpretando aquello que el pobre de Nick (trasunto total del típico personaje de Michael Cera) es incapaz de pensar y mucho menos de decir. Su interpretación y los gags cómicos son, sin duda, lo mejor de la película, plagada de secundarios que dan la talla pero dibujados tan a grandes rasgos que se convierten en puro decorado: Steve Buscemi, Zach Galifianakis, Justin Long, etc.
Lo mejor: François Dillinger.
Lo peor: es una historia típica mil veces contada.