Me lo temía. Me temía que Lee Daniels, más conocido por ser el director de aquella Precious (2009), fuese un soberano aburrimiento. Ya lo fue la película protagonizada por Gabourey Sidibe, ganadora de un Oscar tanto por su interpretación como por su guion en un afán de la Academia de Hollywood por darle más protagonismo a las minorías. En este otro intento, El mayordomo, plagado de celebrities de color o que se hacen pasar de color, como Mariah Carey (que alguien me explique su papel), solo nos encontramos una concatenación de hechos en la historia de la segregación racial de Estados Unidos relatada por un mayordomo que va medrando hasta trabajar en la Casa Blanca, teniendo tanta suerte que su hijo, como si de un Alcántara se tratase, está presente en todos y cada uno de los hechos más trascendentes de la historia de los afroamericanos en Estados Unidos. La diferencia con Cuéntame es que la serie española no nos intenta colar que lo que viven los Alcántara le pasó a una familia de verdad.
Lo único que me ha interesando un mínimo es cómo hacían ver a cada presidente en su vida en la Casa Blanca, pero de los ocho presidentes a los que sirvió Cecil Gaines solo aparecen de forma muy breve Robin Williams como Eisenhower, James Marsden como Kennedy, Liev Schreiber como una caricatura de Lyndon B. Johnson, John Cusack como Nixon y Alan Rickman como el santo Ronald Reagan. Supongo que a Jane Fonda le habrá encantado ser Nancy Reagan porque lo hace realmente genial. Pero lo que es la trama en sí, si es que la hay, aparte de ser en su mayor parte inventada, no tiene ningún atisbo de credibilidad más que la inclusión de imágenes de archivo sobre la evolución de los derechos civiles en Estados Unidos. No entiendo cómo pudo haber tantas buenas críticas y tantas alabanzas a las interpretaciones. La única razón que puedo entender es la misma por la que Precious obtuvo sus premios.
Lo mejor: Alan Rickman y Jane Fonda.
Lo peor: es un Forrest Gump de otro color sin su humor ni sus personajes complejos y además nos intentan colar como historia real.
