Después de ver The Program leí unas cuantas críticas y algunas de ellas mencionaban el documental La mentira de Lance Armstrong como un documental que le daba mil vueltas a la película. Tras hacer el recorrido inverso, lo que me parece es que son largometrajes complementarios. Uno, desde fuera, como el documental de Alex Gibney que, mientras rueda el regreso de Lance Armstrong al Tour en 2009 salta el escándalo del dopaje del norteamericano, y desde dentro, como el «programa» propiamente dicho, mostrando las herramientas de Michele Ferrari para conseguir unos ciclistas que superasen al resto a través del dopaje. El documental muestra más bien que desde varios estamentos prefirieron taparse los ojos que a perseguir un nuevo caso de dopaje tras lo ocurrido con el equipo Festina. No solo la UCI tuvo parte de culpa, sino también a quienes les vino como anillo al dedo el surgimiento del héroe americano, sobreviviendo un cáncer y ganando Tour con el rabo la gorra.
Porque por supuesto que vemos la personalidad del ciclista antes de su cáncer y después, antes de ser campeón y después, con testimonios de cuando no era nadie, de cuando se convirtió en estrella y de cuando todo acabó cuando, acorralado por la agencia antidopaje estadounidense, concedió una entrevista a Oprah Winfrey mostrándose otra vez como una víctima del sistema. Al final queda una sensación de que Lance Armstrong cuenta la verdad justo al principio del documental: él quiere ganar ante todo y a todos, odia perder. Las dos horas de documental retratan su personalidad y hasta llegamos a entender que su hambre de fama y títulos le hizo ser un mentiroso compulsivo, creando una mentira tan grande que llegó a un punto en que necesitaba hundir a los demás para salir él victorioso. Así se forjan los héroes.
Lo mejor: El conmovedor relato de Frankie Andreu y su mujer, la sugerencia de que no solo Lance Armstrong era el corrupto, sino que también las instituciones relacionadas con el ciclismo.
Lo peor: Es un documental demasiado largo, hay datos repetitivos que se podrían haber ahorrado.