Jonathan Dayton y Valerie Faris nos vuelven a meter en el mundo de la tragicomedia junto con Paul Dano. En esta ocasión, nos acercamos a un escritor prodigio, que publicó una novela de éxito cuando era joven llegando a la categoría de «genio», tal y como todos le llaman. Este apelativo y su continuo afán por escribir una nueva novela hacen que su bloqueo creativo sea cada vez más intenso, solo pudiendo descansar las veces en las que saca a su perro a pasear. Pero todo cambiará cuando su psiquiatra le indica que redacte una historieta sobre alguien que se acerca a su perro, sin pretensiones ni interés en publicarlo, lo que hace que nuestro protagonista, Calvin, cree de la nada a la chica de sus sueños haciéndola de carne y hueso.
Esta es la premisa inicial de Ruby Sparks, nombre de «la novia» del protagonista, y que durante la primera mitad es llevada perfectamente de la mano por el dúo principal y los actores secundarios, que se resumen en la familia de Calvin, personificación de la soledad del «genio» y de los gustos cambiantes en cuanto aparece la monotonía en su relación ideal.
Lo mejor: los momentos cómicos, el personaje de Antonio Banderas y de Chris Messina.
Lo peor: ver la película doblada, la segunda parte de la película tiene menos ritmo.