Para conspiranoicos de conspiranoicos, eso es Habitación 237. Documental estrenado en Sundance en 2012, nos muestra toda una serie de teorías de lo más estúpidas (otras de lo más obvias si te fijas en el cuidado con que Kubrick realiza sus películas) sobre el significado de la producción de El resplandor, película de 1980, denostada por muchos críticos y alabada por los que tenemos paciencia e interés en desgranar cada detalle del largometraje. Por supuesto, ya desde el principio nos avisan de que lo que vamos a ver van a ser opiniones subjetivas sobre lo que vemos en la película. Opiniones no de críticos profesionales, sino de espectadores que tuvieron una sensación extraña al ver la adaptación de Stephen King.
Lo que consiguen es introducirnos esa sensación de que nos hemos perdido algo más y, por consiguiente, nos entran ganas de volver a ver El resplandor por enésima vez. Por supuesto, no vamos a creer un gran porcentaje de teorías que nos cuentan espectadores de lo más flipados… pero hay una sensación de «¿Y si…?» bastante intrigante. Veremos planos secuencia imposibles por la estructura del hotel, contraplanos que nos muestran algo diferente a lo que habíamos visto antes o la teoría de que en realidad estamos viendo una metáfora sobre el genocidio de los nativos americanos por parte del hombre blanco (aunque haya algunos que piensen en realidad en el holocausto). Por otro lado, veremos teorías que hacen bastante gracia, como la de que El resplandor es una metáfora sobre la mentira de Kubrick a su mujer sobre el rodaje del alunizaje del Apollo XI, lo de que la película cuadra si se superpone el metraje al revés, lo de que se ve la cara de Kubrick en las nubes en los créditos iniciales y otra serie de puntos cómicos.
Lo mejor: las teorías de planos y contraplanos además de las estructuras imposibles.
Lo peor: las teorías locas que son más paranoia que otra cosa.
