Película para «esos días» en los que todo te da un poco igual y solo quieres ver un producto ligero, que no te haga pensar mucho pero que sea efectivo. Popstar: Never Stop Never Stopping no tiene fecha de estreno en España y probablemente llegue en VOD como llegó John Wick. Se nos presenta la historia en modo documental, como si fuese un especial de la Mtv: el trío rapero The Style Boyz se separa y su estrella, Conner, comienza una exitosa carrera en solitario utilizando a uno de sus antiguos compañeros como DJ. De la misma forma que vemos el ascenso meteórico de Conner en las listas de éxito, también veremos su estrepitosa caída.
Planteada en tono de parodia, lo primero que llama la atención en este mockumentary es el tremendo reparto plagado de estrellas de la televisión y famosos estadounidenses que aparecen aquí, la mayoría en papeles minúsculos (Ringo Starr, Questlove, Usher, 50 Cent), algunos de ellos autoparodiándose (Adam Levine de Maroon 5, Justin Timberlake haciendo de cocinero, Mariah Carey diciendo que no hay nadie más humilde que ella), pero con lo que más «se mojan» es con las letras de las canciones. Unas canciones que no distan mucho, en realidad, del mundo mainstream del rap en la actualidad que tiene millones de seguidores. Popstar: Never Stop Never Stopping no quedará para la posteridad, pero tiene un tono muy divertido y un final con la típica moraleja de que la amistad debe estar por encima de todo.
Lo mejor: Las letras de las canciones.
Lo peor: Repite continuamente la misma fórmula.
