I Kill Giants es otro nuevo intento de acercar la fantasía al público familiar. De todos modos, si para ello tenemos que aguantar tal bodrio, mejor apagar la tele. Puedo sonar insensible, pero la protagonista es una niña tan repelente y estúpida que me da absolutamente igual lo que le pase a ella.
Para que nos entendamos, I Kill Giants es la adaptación al cine de una serie de novelas gráficas. Por las imágenes, parece que visualmente está bien adaptada, aunque voy a dejar esto para quien tenga el conocimiento sobre el material original. El resultado de esta adaptación resulta en una trama aburrida con un personaje insoportable, el más claro ejemplo de la tontería adolescente en el que parece que todo el mundo está contra ti.
En la presentación de la protagonista ya vemos que vive en su mundo, al parecer creyendo que lucha contra gigantes. Está claro que vive en un mundo de fantasía paralelo a la realidad que no quiere asumir. En su casa, la primera imagen es la de su hermana mayor (Imogen Poots) haciendo la cena para sus dos hermanos mientras la protagonista juega a un juego de rol ella sola ocupando la mitad de la mesa y protestando porque su hermano y un amigo están jugando a videojuegos haciendo mucho ruido. Hasta el punto que la protagonista se levanta, desenchufa la tele y les echa la bronca… ¿por no ayudar a poner la mesa? No, por no jugar a juegos imaginativos.
Pese a que es una niña solitaria que vive aislada en su mundo (en el que se cree la salvadora de la ciudad por haber matado gigantes), por la insistencia de una nueva vecina de su edad y la psicóloga del colegio comienza a abrirse hasta reconocer sus problemas. Uno, es víctima de bullying en el colegio. Y dos, algo que no conoceremos hasta el último tramo de película…
La madre de la protagonista vive encamada en el piso superior de la casa porque le queda poco de vida por una enfermedad de la que no se habla. Este final se alarga como un chicle.
El desarrollo de la peli es de lo más aburrido y lo único en que pienso durante el metraje es en lo mucho que ha tenido que aguantar el personaje de la hermana mayor no solo con su hermana pequeña sino también con su hermano. En lugar de ser un cero a la izquierda, que lo son a la hora de encargarse de las tareas del hogar, son un estorbo más de los que ocuparse. Así que he de reconocer que, más que aburrirme, I Kill Giants me ha puesto de los nervios de lo machacona que es.
Yay & nay
Lo mejor: La interpretación de Imogen Poots.
Lo peor: El personaje protagonista. Una historia lacrimógena y previsible. Desarrollo aburrido y sin emoción. Efectos visuales que evidencian el poco presupuesto.
Puntuación
