Straight Outta Compton fue el primer disco de NWA, el comienzo de una era, la del gangsta rap, en un momento delicado en cuanto a la conflictividad social, y más concretamente en la zona de Los Ángeles. Y Straight Outta Compton es la película que retrata todo ello: el origen de NWA, el principio de la formación, la subida al éxito, los primeros problemas, la separación y la reconciliación. Al intentar contar todo lo que ocurrió en unos pocos años nos acercamos peligrosamente a las tres horas.
El problema de la duración es algo que va acorde a la posición que se intenta tomar: Straight Outta Compton está llena de clichés y tópicos que además ensalzan las figuras santificadas de algunos de los miembros de NWA quienes, precisamente, están detrás de la producción ejecutiva de la película. Dr. Dre y Ice Cube son perfectos, como esos héroes intachables de las americanadas de acción… solo que en versión rap. Para que os hagáis una idea, no recuerdo haber visto al personaje de Dr. Dre fumando ningún porro ni metiéndose nada. Pero en fin, estos son pequeños detalles. La película en general es suficientemente interesante y los actores, sorprendentemente, están a la altura de lo que supone. Incluso el hijo de Ice Cube lo hace francamente bien, así que no hay nada malo que decir en cuanto al reparto. Han estado todos de lujo.
Lo mejor: Las actuaciones, las escenas iniciales donde se presentan a los personajes.
Lo peor: El tramo final, el interés en contar aspectos de la vida de los miembros de NWA que no aportan nada a la historia.
