¿Un nuevo reboot de Spider-Man en el universo Marvel? ¿Es que estamos locos? Spider-Man: Un nuevo universo es consciente de ello y comienza fuerte haciendo referencia a lo mejor y lo peor de cada saga, incluso mencionando aquella infame escena de la tercera película del personaje dirigida por Sam Raimi.
Spider-Man: Un nuevo universo es una vuelta de tuerca del álter ego de Peter Parker.
Por otro lado, intentaré no hacer spoilers para intentar que aquellos que no han leído nada sobre la trama, sigan del mismo modo para que, de esa manera, puedan disfrutar la película tanto como yo.
Este nuevo reboot (o lo que sea) del universo de Spider-Man cuenta con doblajes de actores como Chris Pine, Jake Johnson, Mahershala Ali, Lily Tomlin, Nicolas Cage o Liev Schreiber. Todos ellos realizan una gran labor de mimetización con sus personajes. El trabajo de selección del reparto ha sido espléndido por aunar la visión que tenemos de esos actores con los personajes que interpretan.
El protagonista, un chaval del Bronx que estudia en una escuela elitista, podría ser cualquier adolescente que se ve superado por los acontecimientos. El desarrollo de la trama tiene más que ver con adentrarnos en el universo de un cómic de Spider-Man en un mundo de fantasía y ciencia ficción.
Llevando un paso más allá a lo que pudimos ver en Scott Pilgrim contra el mundo, en este nuevo universo seguimos los pasos de Miles con una estética urbana y comiquera sin olvidarse del humor a raudales y la originalidad de la propuesta.
El resultado final son casi dos horas en las que disfrutaremos de los personajes, tanto principales como secundarios, con una historia original, fresca y, a la vez, cercana a los clásicos tebeos de tu infancia.
Yay & Nay
Lo mejor: La propuesta del multiuniverso. El tratamiento del color. La inclusión de la estética comiquera. Sus escenas humorísticas. Doblaje.
Lo peor: Un último tramo alargado como cualquier película de superhéroes. Segunda mitad un poco previsible.