Si estás buscando una peli de espías cibernéticos que derive a un thriller más o menos interesante, deberías alejarte de Blackhat – Amenaza en la red. No hay duda de que Michael Mann es capaz de dirigir escenas de acción con acierto, pero la historia tan insulsa que intenta contarnos no merece un metraje de más de dos horas. La historia nos lleva a unos ciberataques producidos en China, cuyo gobierno encarga a un mando militar que estudió en Estados Unidos que estudie lo sucedido. Parece ser que el empollón necesita a la única persona en quien confía para poder resolver el problema es Thor Nick Hathaway, un hacker al que sacarán de la cárcel a cambio de su ayuda.
A través de una trama de lo más enrevesada, el protagonista se enrollará con la hermana de su mejor amigo y juntos intentarán escapar o trincar a los malos, nunca lo sabremos. Porque si hay algo de lo que adolece Blackhat es de un guion que sostenga lo que vemos en pantalla. Los pocos diálogos que tendremos serán bobalicones y predecibles, el paso de una escena no se explica, a veces vemos la historia como una especie de enlace de cortos sin relación los unos con los otros y eso empaña lo que podría haber sido. Michael Mann me ha vuelto a defraudar y cada vez más pienso que su hito en el mundillo audiovisual fue la serie Luck que tuvo que ser cancelada por la muerte de varios caballos utilizados en el rodaje.
Lo mejor: Algunas escenas de disparos que no son ridículas, la idea de que cualquiera puede ser un hacker, banda sonora.
Lo peor: Guion, actuaciones, demasiada duración.
Si no mola tanto como operación swordfish o unfriended ya no me llama mucho, además el señor Mann defraudarme últimamente pero bueno está bien saber de esta peli, yo no la conocía
Operación Swordfish a mí me moló (dentro de lo que cabe), y esta hasta es demasiado dispersa como para llamarle peli.